El portavoz de ERC en el Congreso de los Diputados, Gabriel Rufián, enseñó este martes en la Cámara Baja tres balas recogidas en la frontera de Melilla “con las que mataron a 37 personas” tras el intento de asalto a la valla de hace unas semanas, provocando el enfado del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.
Así lo indicó Rufián en su turno de intervención en el Debate sobre el estado de la Nación mientras ponía esas tres balas sobre la tribuna. Fuentes parlamentarias aseguraron que Sánchez le pidió que no las vinculara a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad de España. En este sentido, el portavoz de ERC en el Congreso añadió “ustedes no, la Gendarmería marroquí”.
Asimismo, preguntó tanto al PSOE como al PP por qué 130 africanos “asaltando una valla son una mafia” y 130.000 ucranianos desplazados son “una causa”. “¿Por qué matar a palos y a balazos en la frontera sur de Europa es menos grave que matar a bombas en un centro comercial de Ucrania?”, cuestionó.
Según Rufián, la diferencia es que los ucranianos “son rubios y con ojos azules” y “los otros no” y añadió que la respuesta a la primera pregunta es que “necesitaban a Marruecos” como “vigilantes de seguridad de la valla, aun a costa del Sahara”.
“SE HA EQUIVOCADO”
En su turno de réplica, Sánchez reconoció a Rufián la “brillantez parlamentaria” que tiene en algunas ocasiones, pero aseguró que hoy “se ha equivocado gravemente”. A su juicio, la “mera exhibición de balas es un error imperdonable”, ni siquiera “con fines probatorios, ni siquiera como truco efectista”.
El Congreso, continuó, no es una Corte Penal, sino “el templo de la palabra”. “Aquí entraron balas, sí, señoría, entraron balas. Están en los techos de esta casa y fueron traídas por golpistas. Se ha equivocado, señoría. Se ha equivocado”, añadió. «La sobreactuación no es buena y ahí lo dejamos», concluyó Sánchez cuando volvió a tomar la palabra tras este incidente.
Tras la intervención de Rufián, la presidenta del Congreso, Meritxell Batet le llamó la atención por el uso de objetos en tribuna y le reiteró que la “fuerza parlamentaria” de esta Cámara es el “uso de la palabra”, por ello le instó a hacer “uso exclusivo de la palabra”.
Al finalizar la sesión plenaria, Rufián se acercó al escaño del presidente y ambos mantuvieron una conversación durante unos minutos en la que se percibió que zanjaban las diferencias verbalizadas desde la tribuna entorno a este tema.
(SERVIMEDIA)
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