En el contexto de la operación SIVA, se ha producido la desarticulación por parte de la Guardia Civil de una banda involucrada en la comercialización de drogas ilícitas, especialmente cocaína. Esta banda tenía su base en la Cañada Real Galiana y en Mejorada del Campo, ubicados en la Comunidad de Madrid.
De acuerdo a lo informado el domingo por la Guardia Civil, un total de 17 individuos han sido arrestados por su supuesta participación en actividades delictivas relacionadas con el comercio de estupefacientes, pertenencia a una organización criminal, posesión ilegal de armas, lavado de dinero y fraude eléctrico.
Se inició la investigación a finales del 2023 al detectar un incremento en el movimiento de individuos que abandonaban el Sector III de la Cañada Real Galiana portando diversas sustancias estupefacientes. Se implementaron dispositivos de vigilancia sigilosa en las cercanías y se consiguió identificar a los responsables de la atención a los consumidores en tres lugares de venta de droga distintos.
A partir de ese momento, los investigadores lograron identificar al suministrador principal, radicado en Mejorada del Campo, y así desenmascarar una organización delictiva que superaba estos tres puntos de venta. Además, el grupo criminal se dedicaba a comercializar diversas sustancias estupefacientes a domicilio con el fin de evitar la presencia de consumidores cerca de sus viviendas. Parte de las ganancias obtenidas por la venta de droga eran recibidas a través de Bizum o mediante depósitos directos en cajeros automáticos, lo que les permitió acumular un total de 44.233 euros durante el último año.
Las medidas de seguridad adoptadas por el grupo eran muy estrictas. Abastecían los tres puntos de venta con cantidades reducidas para no despertar sospechas y asegurarse de que no quedara nada almacenado al final del día. Escondían la droga en un terreno baldío cercano, enterrándola bajo tierra, y en caso de necesitar más, podían acceder a ella en cuestión de minutos. Además, de esta manera evitaban tener droga en sus casas, por si ocurriera un registro policial.
A veces, en estos desplazamientos hacia el terreno baldío, se servían de chicos más jóvenes que los acompañaban para pasar inadvertidos y siempre empleaban en sus traslados otro automóvil, como un vehículo auxiliar para alertar de posibles inspecciones policiales.
El grupo contaba con 17 integrantes. Dos hombres, líderes de las familias, encabezaban el grupo y colaboraban en secreto para esconder la cocaína en el mismo lugar, compartiendo el principal proveedor. El resto del grupo se encargaba de vender, transportar y distribuir, e incluso algunos establecían horarios de atención en los puntos de venta.
En total, se llevaron a cabo simultáneamente cuatro operaciones de ingreso y registro, logrando confiscar más de un kilogramo de cocaína, 2CB, tres armas de fuego y 85,000 euros en efectivo. Además, se decomisaron tres vehículos, se bloquearon 18 cuentas bancarias con un saldo superior a 55,000 euros y se informó al tribunal sobre cuatro viviendas y dos plazas de garaje que podrían estar involucradas en el lavado de dinero para su posterior venta judicial.
La organización ha sido desmantelada, con la captura de 17 individuos, 11 hombres y 6 mujeres, a quienes se les imputan delitos como narcotráfico, pertenencia a una banda criminal, posesión ilegal de armas, fraude en el suministro eléctrico y lavado de dinero. Tras comparecer ante la autoridad judicial correspondiente, se determinó el encarcelamiento de dieciséis personas.
(SERVIMEDIA)