El estadio Camp Nou fue mudo testigo (no hubo público en las tribunas por la pandemia del coronavirus) del debut en la temporada de un ‘Barsa’ que buscó disimular ausencias y redimirse del lacerante 2-8 ante el Bayern Munich, por la última Liga de Campeones de Europa.
A medias y ante un rival absolutamente limitado, el ‘nuevo equipo’ del crack rosarino diseñó una nítida superioridad, pese a que el funcionamiento colectivo satisfizo, solamente, de a ratos.
Y en ese contexto sorprendió el hecho de que Messi no fuera el puntal de la ofensiva de un elenco blaugrana que intenta olvidar lo más rápido posible la partida de Luis Suárez, el uruguayo que hoy empezó a pagar con goles (2) en su estreno con Atlético de Madrid.
Es que el goleador histórico de la entidad catalana se movió como una suerte de ‘falsa’ referencia de área, jugando por el centro ante dos defensores que otorgaron ventajas pero, así y todo, no sufrieron la demoledora cuota de contundencia que suele desplegar el ’10’ del seleccionado argentino.
Es más, a Messi pareció costarle el partido desde lo físico, a partir de que casi no tuvo pretemporada de preparación, desde que se desató el ‘culebrón’ de una eventual salida que finalmente devino en continuidad con disconformidad.
La llave que tuvo el Barcelona para abrir la zaga adversaria estuvo por el costado izquierdo del ataque, cada vez que Jordi Alba y el juvenil Ansu Fati ofrendaron como pistones por ese sector.
El juvenil, de 17 años y con ascendencia africana que ya debutó con el seleccionado de España, marcó los dos primeros tantos (Pt. 15m. y 19m.). Y generó el penal (falta de Mario Gaspar) que originó el tercero, cortesía de un remate de Messi, abajo y contra el palo derecho de Asenjo (Pt. 34m.).
Otra buena intervención del capitán del ‘Barsa’ que lanzó un envío ‘picante’ al área rival propició un rechazo apurado de Pau Torres (Pt. 45m) que se transformó en gol en contra y permitió el 4-0 definitivo.
El segundo período estuvo completamente de más. Porque Barcelona, más allá de algunos arrestos individuales aislados, sacó el pie del acelerador, mientras Villarreal, más allá de que mejoró ligeramente con el ingreso del japonés Take Kubo (de la cantera del Real Madrid) no tuvo nunca poder de fuego como para inquietar a Neto, hoy reemplazante del alemán ter Stegen.
En el equipo visitante ingresó a falta de seis minutos, el exzaguero de River, Ramiro Funes Mori, mientras el guardavallas Gerónimo Rulli (ex Estudiantes de La Plata) permaneció en el banco de suplentes.
En el Barcelona de Koeman, que tuvo un convincente debut desde lo numérico aunque no tanto en el rendimiento, se produjo la primera convocatoria para el juvenil argentino Santiago Ramos Mingo (inferiores de Boca Juniors), quien llegó a la institución blaugrana haciendo uso de la patria potestad.
Este jueves, el equipo del entrenador neerlandés se trasladará hasta Vigo para medirse con el local Celta, mientras que Villarreal jugará un día antes frente a Alavés.
-Síntesis-
Barcelona: Neto; Sergi Roberto, Piqué, Clement Lenglet y Jordi Alba; Frenkie de Jong, Sergio Busquets y Philippe Coutinho; Antoine Griezzman, Lionel Messi y Ansu Fati. DT: Ronald Koeman.
Villarreal: Asenjo; Mario Gaspar, Raúl Albiol, Pau Torres y Pervis Estupiñán; Dani Parejo y Francis Coquelin; Samuel Chukwueze, Gerard Moreno y Moi Gómez; Paco Alcácer. DT: Unai Emery
Goles en el primer tiempo: 15m. y 19m. Ansu Fati (B); 34m. Messi (B) de penal; 45m. Pau Torres en contra (B)
Cambios en el segundo tiempo: antes del comienzo; Iborra por Paco Alcácer y Manu Trigueros por Coquelin (V); 25m. Ousmane Dembele por Ansu Fati y Pedri por Coutinho (B); 29m. Take Kubo por Chukwueze (V); 33m. Trincao por Griezzman y Miralem Pjanic por Busquets (B); 38m. Ramiro Funes Mori por Albiol (V); 39m. Carlos Bacca por Moreno (V)
Amonestado: Moreno (V)
Estadio: Camp Nou (Barcelona)
Arbitro: Cuadra Fernández.